El Ateneo Gualeguaychú cumple hoy 24 años
A los 34 años del retorno de la democracia -con la Jura de Raúl Alfonsín y Víctor Martínez, presidente y vice, vencedores en las elecciones generales que se llevaron a cabo el 30 de octubre de ese año-, el Ateneo Gualeguaychú celebrará esta noche los 24 años de su creación -en 1993, en la cancha de básquet del Club Juventud Unida - y el primero de su instalación en la s
Si bien las dos fechas primeras son el domingo 10, cuestiones organizativas decidieron a la gente del Ateneo a realizarla esta noche.
“Vamos a celebrar con participación abierta de la comunidad. Hemos invitado a las fuerzas políticas de Gualeguaychú y nos acompañarán con sus actuaciones Ballet El Lazo y el Grupo Ironía”, adelantó Ricardo Rodríguez, agregando que por la cantidad de gente que ha comprometido asistir, el festejo se hará en la calle.
La democracia, perfectible
“La democracia es un logro de todos los argentinos”, consideró Rodríguez, “que nos permitió, aún con dolor, reencontrarnos con la vida, la esperanza, con nuestros derechos, para que podamos decidir qué queremos ser y qué no. La democracia tomó un país al borde del abismo, y los argentinos en un gesto vital dijimos ¡basta! y
depositamos las responsabilidades de conducción, consenso, diálogo, en una mayoría que encabezó Raúl Alfonsín, un hombre que hoy es reconocido como la cara de la democracia”.
“Juzgó a los principales responsables del genocidio argentino, lo que fue un ejemplo en el mundo para la búsqueda de justicia. Trabajó en la consolidación de la democracia, tanto como para insertar Argentina en Latinoamérica a través del MERCOSUR... Sufrió grandes críticas por el pacto de Olivos, pero con esto logró evitar que Menem modificara la Constitución Nacional para obtener la reelección indefinida. Esto debemos reconocerlo hoy más que nunca”.
Tras considerar “aún así, hay deudas de la democracia”, Rodríguez marcó como tales a la pobreza y la desigualdad y dijo “si en un estado de derecho no logramos vencerlas, estamos mal”.
Otra deuda, apuntó EL ARGENTINO, es la corrupción que se coló en algún momento haciendo, que a pesar de tener todos los suelos, todos los climas, la capacidad de su gente, Argentina no esté como debiera, y Rodríguez razonó “esto se soluciona con más control ciudadano, mejorando las instituciones y respetándolas, como las respetó Alfonsín”.
Otras deudas de la democracia, insistimos, son las jubilaciones de privilegio y más inquietante aún, que se use al Congreso como escudo protector por los fueros que otorga.
“No tuvimos un preso en esa época democrática. Después vinieron los descalabros de Menem y esto último que pasamos....”
De esa época se recuerda el caso de la importación de pollos que promovió el ex secretario de Comercio Interior, Ricardo Mazzorín frente al lock out de los productores. Una parte de los pollos importados se pusieron en mal estado y empresas y productores aprovecharon para atacar al Gobierno, y los precios, que habían bajado al principio de la medida, subieron como lo hicieron después el resto de los productos en una espiral que en 1989 terminó de la peor manera: con la primera hiperinflación de la democracia y con Alfonsín adelantando las elecciones.
“Mazzorín renunció en junio de 1988. En cuanto a las causas judiciales, fue sobreseído libre de culpa y cargo en 1995”, recordó Rodríguez, para agregar “es lo que decía: esto no es perfecto. Hay que mejorarlo a través -otra vez- de la participación. En esta búsqueda de la participación nació el Ateneo, un espacio plural, un ámbito de participación”.
Ateneo que cumplirá 24 años el domingo 10 y lo festejará esta noche.
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