Nueva protesta social contra el barrio náutico Amarras y en defensa de los humedales
Ningún ciudadano puede exigirle a un intendente como Mauricio “Palito” Davicco (Pueblo General Belgrano), que tenga conciencia ambiental e incluso nadie está en condiciones de exigirle siquiera que adopte en su gestión la defensa de la biodiversidad. Pero lo que sí se le debe exigir a todo intendente es el apego a las normas y a la ley.
Del mismo modo, nadie puede exigirle al empresario García Trícoli de la firma Altos de Unzué, que pretende construir el barrio náutico Amarras sobre el río Gualeguaychú, que tenga conciencia ambiental a la hora de invertir. Pero sí se debe exigir a todo empresario que sea respetuoso de la ley y no avasalle derechos de terceros.
Hoy vecinos de Gualeguaychú volverán a marchar contra la construcción del barrio fluvial Amarras, que es defendido a capa y espada por la empresa Altos de Unzué y la Municipalidad de Pueblo General Belgrano.
La convocatoria la realiza la ONG Salvemos al Río Gualeguaychú y está prevista la concentración a las 14:30 en la cabecera del puente Méndez Casariego y de ahí se marchará hasta el predio, a travesando el Parque Unzué y llegando hasta la zona conocida como El Mangrullo.
“Necesitamos el apoyo de nuestra máxima autoridad, el gobernador Gustavo Bordet. Necesitamos que nos asegure la transparencia de los trámites administrativos que se sustancian en la Secretaría de Ambiente y en la Dirección de Hidráulica. No queremos sentirnos desamparados por nuestra máxima autoridad política; quien manifestó muchas veces su interés por el cuidado del ambiente”, se sostuvo desde la ONG convocante.
“Hemos soportado muchas cosas desde nuestra condición de ciudadanos y nuestro Municipio está soportando el ninguneo de una empresa privada que es ilegal, porque no tiene licencia social, ni las autorizaciones provinciales correspondientes”, aseveraron para dar cuenta que la conflictividad social va en aumento.
También indicaron que se resisten a aceptar ser inundados por un emprendimiento urbanístico “exclusivo” y “excluyente”.
Más apoyos
Ayer el bloque de Concejales de Cambiemos (Gualeguaychú) emitió un comunicado de prensa brindando su apoyo a la movilización y recordó que se opone a la construcción de este emprendimiento inmobiliario que alterará el curso del río.
Si bien se indicó que es necesario “avanzar de manera urgente” con el estudio de impacto ambiental que realizará la Universidad Nacional de La Plata para despejar cualquier tipo de dudas, en cuanto a alteraciones de las condiciones naturales de su entorno, es oportuno contextualizar que dicho estudio será entregado mañana al Departamento Ejecutivo Municipal, tal como lo adelantó en EL ARGENTINO la directora de Ambiente, Susana Villamonte.
“Los ediles de la primera minoría entienden también que el ambiente es un patrimonio natural y cultural innegociable, y que el cuestionado emprendimiento genera controversias y conflictos porque toca temas sensibles para la comunidad como lo son la alteración del paisaje y los impactos en el ambiente”, reza en uno de sus párrafos el comunicado de los concejales de Cambiemos.
Además, reconocen la preocupación de la comunidad y apoyan el compromiso por el cuidado de los recursos naturales, la protección de los humedales, el río y el paisaje autóctono.
En ese sentido, el bloque de Cambiemos recordó la aprobación unánime, el 31 de marzo, de la Resolución N° 2/16 del Honorable Concejo Deliberante por medio de la cual “se ratifica la postura tomada públicamente por el HCD, oponiéndose a la radicación y desarrollo del emprendimiento privado (Amarras) sin que existan las garantías correspondientes que aseguren la no afectación y preservación del ambiente y la salud de todos los habitantes de la zona”.
También declaró “el total apoyo a la realización del nuevo estudio de impacto ambiental por intermedio de la institución pública que al efecto se proponga y a que el costo que el mismo insuma sea financiado por el Municipio, debiendo de modo imperioso y contundente tomar las medidas necesarias para lograr el recupero correspondiente y que sea la empresa Altos de Unzué quien en definitiva soporte los costos”.
Los concejales también sostienen que “esa resolución, apoyada por todos los bloques, es clara al expresar la oposición a la construcción del emprendimiento sin que haya un estudio de impacto ambiental”, sostuvo el presidente del bloque Cambiemos, Pablo Echandi. Y agregó: “Es por eso que acompañamos la preocupación de la comunidad respecto a las alteraciones que podría generar Amarras, pero también queremos que se cumpla con un paso importante legal que debió llevarlo adelante la empresa antes de comenzar con cualquier intervención sobre el terreno”.
Por su parte, el concejal Jacinto Berón agregó apuntó contra “el avasallamiento de las empresas privadas (por Altos de Unzué) que buscan los hechos consumados”.
En el mismo sentido se expresó la concejal Araceli Traba, quien afirmó que la “impulsividad de la empresa sumado a la pasividad del Estado fueron dos componentes que dieron como resultado que Amarras haya avanzado de esa manera”.
De todos modos, la edil destacó el “compromiso asumido” por la gestión del intendente Martín Esteban Piaggio, que destinó 400 mil pesos para financiar el estudio hidrológico y de potencial riesgo socioambiental de Amarras, que realizará la Universidad Nacional de La Plata y que mañana será entregado a las autoridades locales.
Antecedentes
El 5 de junio, EL ARGENTINO publicó que desde el 7 de abril que las partes (Altos de Unzué y municipio de Pueblo General Belgrano) sabían que el estudio lo tenía que realizar la UNLP.
“La empresa Altos de Unzué, que lleva adelante con la fuerza de los hechos consumados la construcción del barrio náutico Amarras; y la Municipalidad de Pueblo General Belgrano que la apoya de manera casi incondicional, sufrieron un duro revés al determinarse que la Universidad de La Plata realizará los estudios pertinentes y no la Universidad Nacional Tecnológica (UTN) como pretendían sus promotores”, se recordó en esa oportunidad.
“El intendente de Pueblo General Belgrano, Mauricio Davico, había planteado por nota el 5 de mayo a la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos, que se autorizara a Amarras a continuar con las obras del emprendimiento. Para ello argumentó que el Grupo de Estudios para la Contaminación del Río Uruguay (Gecru) de la UTN Regional Concepción del Uruguay había dado el visto bueno. Además, insistió en esa misma nota que “el Municipio de Gualeguaychú no ha presentado nada a nivel científico” (sic) y agregó: “tan sólo conjeturas y suposiciones, que no son válidas en esta instancia, donde debemos manejarnos con datos y ser lo más profesional posible”.
Pero esa postura se contradice con la Carta Documento fechada el 7 de abril pasado y emitida por la directora de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Ambiente, María Florencia Amore, en la que notificó a las partes la siguiente resolución:
Artículo 1° tener por cumplimentado, en tiempo y forma, por parte de la Municipalidad de Gualeguaychú, lo dispuesto en el Artículo 1° de la Resolución N° 005/16 de la Secretaría de Ambiente, y por lo tanto facultar a la Unidad de Vinculación Tecnológica: Fundación de la Facultad de Ingeniería para la Transferencia Tecnológica y la promoción de empresas de bienes y servicios dependiente de la Universidad Nacional de La Plata, a fin de que tomen intervención en el presente trámite, acreditando debidamente personería, constituya domicilio y proceda al análisis de las actuaciones, y presente el informe descripto en los considerandos y ordenado por el Decreto 258/15 GOB, en un plazo de sesenta días hábiles.
En la edición del 5 de junio, EL ARGENTINO se preguntó: “¿Por qué sabiendo de la existencia de esta Carta Documento tanto la Municipalidad de Pueblo General Belgrano como Amarras insistieron con la UTN? No se sabe, aunque se sospecha que fue a los efectos de dilatar y confundir a la población. ¿Por qué reclamaron que la Municipalidad de Gualeguaychú sea más expeditiva mientras ellos adeudaban documentación básica? No se sabe, aunque se sospecha que para confundir a las comunidades ribereñas. Lo que sí se debe tener en claro que nada es inocente en un emprendimiento de estas características”.
Fallo
El 27 de diciembre del año pasado, EL ARGENTINO informó que la empresa Altos de Unzué, la Municipalidad de Pueblo General Belgrano y el gobierno provincial fueron condenados el 23 de diciembre por el juez Leonardo Portela a cargo del Juzgado Civil y Comercial N° 3 por sus responsabilidades en la construcción del barrio náutico Amarras del Gualeguaychú.
En esa edición se explicó cómo pretenden apropiarse del río, que es un bien innegociable común a todos los vecinos.
“La utilización como propio de un río de aguas navegables y por ende del dominio público del Estado, no es una situación pasible de autorización, ya que implica la cesión de territorio estatal a un particular”, recordó el magistrado.
También el juez reconoció que el Estado puede desafectar un bien de dominio público, pero recordó que esa decisión la debe tomar el Congreso sea nacional o provincial, dependiendo de quién sea su titular. Y concluyó que “los cursos de agua que transiten por cauces naturales son del dominio público del Estado y no pueden ser alterados”.
Por eso hoy la sociedad volverá a movilizarse: para impedir que el río sea alterado, que sus derechos sean avasallados y en reclamo de la ley de Humedales, tan necesaria para proteger nada menos que la vida de todos.
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