Las energías renovables salen a pista en Bs. As.
¿Qué podría resultar más futurista para el automovilismo deportivo mundial que ver al sobrino del genial brasileño Ayrton Senna y al hijo del francés Alain Prost sacándose chispas en una pista de carreras tal como lo hacían su tío y su padre en la década de 1990 en la Fórmula Uno, pero montados sobre coches eléctricos?
Pues bien, el futuro ha llegado, el futuro es hoy, ya que tanto Bruno Senna como Nicolas Prost serán dos de los animadores que tendrá mañana a partir de las 16:04 la flamante categoría de autos amigables con el medio ambiente Fórmula E en su presentación en Buenos Aires, por la cuarta fecha de su temporada de estreno.
Las energías renovables saldrán a pista este sábado en un circuito callejero de 2.407 metros de cuerda emplazado en el corazón del coqueto Puerto Madero, donde la FE promete ofrecer a los argentinos un espectáculo colorido y novedoso, aunque sin ruido de motores como sucede en cualquier otra categoría.
Otra peculiaridad de la categoría es la estrecha relación que mantiene con el público, que mediante una aplicación web puede votar y beneficiar con una inyección adicional de potencia a su piloto favorito durante la prueba: en Buenos Aires, el plazo para la elección vence este sábado por la tarde.
Junto a la fuente de Las Nereidas en la Costanera Sur, la cuarta fecha del campeonato inaugural de la FE se largará mañana a las 16:04, después de ensayos libres a partir de las 8:15 y de las pruebas de clasificación, desde las 12:00. La carrera será a 35 vueltas en un circuito que tiene 12 curvas.
A las 15:40 se informará quiénes son los tres pilotos elegidos por el público mediante el "FanBoost" para obtener en dos ocasiones -una con cada auto- un plus de potencia durante cinco segundos, para alcanzar los 243 HP.
Además de Senna y Prost, dos apellidos que en la década de 1990 en la Fórmula Uno eran sinónimo de duelos encarnizados por la victoria y el título, el público que asista a la carrera de este sábado podrá ver en acción a otros corredores de renombre, como Nelsinho Piquet -hijo del brasileño Nelson Piquet- y Marco Andretti, nieto de Mario Andretti, el fundador de una dinastía de corredores de autos en Estados Unidos.
El puntero del campeonato, el brasileño Lucas di Grassi (58 puntos) y sus dos escoltas en el certamen, el suizo Sebastien Buemi (40 y ganador en la prueba anterior, en Punta del Este) y el británico Sam Bird (40 y vencedor en Malasia), también se perfilan como probables animadores de la carrera.
Di Grassi se impuso en China, en la competencia debut de esta categoría fiscalizada por la FIA (la Federación Internacional del Automóvil) y en la que si bien los coches son parecidos a los de la Fórmula Uno, su perfil ecológico la convierte en una propuesta deportiva innovadora y única.
El experimentado italiano Jarno Trulli y el alemán Nick Heidfeld -otro ex F1- también pretenden sumarse a la nómina de candidatos a la victoria en Buenos Aires, donde el Gobierno porteño decidió entregar en forma gratuita 10 mil entradas para que las gradas luzcan colmadas este sábado.
Las energías renovables saldrán a pista este sábado en un circuito callejero de 2.407 metros de cuerda emplazado en el corazón del coqueto Puerto Madero, donde la FE promete ofrecer a los argentinos un espectáculo colorido y novedoso, aunque sin ruido de motores como sucede en cualquier otra categoría.
Otra peculiaridad de la categoría es la estrecha relación que mantiene con el público, que mediante una aplicación web puede votar y beneficiar con una inyección adicional de potencia a su piloto favorito durante la prueba: en Buenos Aires, el plazo para la elección vence este sábado por la tarde.
Junto a la fuente de Las Nereidas en la Costanera Sur, la cuarta fecha del campeonato inaugural de la FE se largará mañana a las 16:04, después de ensayos libres a partir de las 8:15 y de las pruebas de clasificación, desde las 12:00. La carrera será a 35 vueltas en un circuito que tiene 12 curvas.
A las 15:40 se informará quiénes son los tres pilotos elegidos por el público mediante el "FanBoost" para obtener en dos ocasiones -una con cada auto- un plus de potencia durante cinco segundos, para alcanzar los 243 HP.
Además de Senna y Prost, dos apellidos que en la década de 1990 en la Fórmula Uno eran sinónimo de duelos encarnizados por la victoria y el título, el público que asista a la carrera de este sábado podrá ver en acción a otros corredores de renombre, como Nelsinho Piquet -hijo del brasileño Nelson Piquet- y Marco Andretti, nieto de Mario Andretti, el fundador de una dinastía de corredores de autos en Estados Unidos.
El puntero del campeonato, el brasileño Lucas di Grassi (58 puntos) y sus dos escoltas en el certamen, el suizo Sebastien Buemi (40 y ganador en la prueba anterior, en Punta del Este) y el británico Sam Bird (40 y vencedor en Malasia), también se perfilan como probables animadores de la carrera.
Di Grassi se impuso en China, en la competencia debut de esta categoría fiscalizada por la FIA (la Federación Internacional del Automóvil) y en la que si bien los coches son parecidos a los de la Fórmula Uno, su perfil ecológico la convierte en una propuesta deportiva innovadora y única.
El experimentado italiano Jarno Trulli y el alemán Nick Heidfeld -otro ex F1- también pretenden sumarse a la nómina de candidatos a la victoria en Buenos Aires, donde el Gobierno porteño decidió entregar en forma gratuita 10 mil entradas para que las gradas luzcan colmadas este sábado.
Este contenido no está abierto a comentarios