La Asamblea Gualeguaychú recibirá una distinción
El lunes 10 es el Día Internacional de los Derechos Humanos y la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) desarrolla numerosas actividades, entre las que se destaca la entrega del Premio ?Rector Mauricio López? a la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú.
El Premio ?Rector Mauricio Amílcar López?, se otorga en reconocimiento a la persona o institución que se haya destacado en la defensa y promoción de los Derechos Humanos.
Las propuestas presentadas para la edición 2007 fueron evaluadas por el jurado integrado por representantes de las siguientes instituciones: Universidad Nacional de San Luis (UNSL), Asociación de Docentes Universitarios (ADU), Asociación del Personal de la UNSL (APUNSL), Federación Universitaria San Luis (FUSL) Asamblea Permanente de los Derechos Humanos (APDH), APDH-San Luis y Movimiento Ecuménico de los Derechos Humanos (MEDH).
El jurado por consenso decidió otorgar el ?Premio a la Asamblea de Gualeguaychú?, por la labor desarrollada en defensa de los derechos humanos a preservar el medioambiente para el desarrollo de la vida en plenitud.
El jurado además resolvió otorgar dos Menciones Especiales, una post mortem para monseñor Jaime Francisco De Nevares, por su conocida labor como pastor de comunidades indígenas, su lucha por El Chocón y su actuación a favor de los derechos humanos en la época de la dictadura, siendo obispo de Neuquén. La otra al ?Colectivo de Derechos de la Infancia y Adolescencia?, por su trabajo en la defensa de los derechos y su incidencia pública ante los Estados nacionales y organizamos internacionales a través de informes de la situación de la niñez y adolescencia en todo el país.
El Premio ?Rector Mauricio Amílcar López? ha sido otorgado a las siguientes personalidades e instituciones: En 1994 a Magdalena Ruiz Guiñazú. En 1995 a UNICEF Argentina. En 1996 al Padre Luis Farinello. En 1997 a la Hermana Paulina. En 1998 a la Asociación Abuelas Plaza de Mayo. En 1999 a la Hermana Martha Peloni. En 2000 al doctor Leandro Chungo Despouy. En el 2001 a León Gieco. En el 200 a Alberto Morlachetti, fundador de Pelota de Trapo, ONG dedicada a asistir a chicos de la calle. En 2003 a Lila Amieva de Suárez, por la defensa de las personas que han sufrido la violación de los Derechos Humanos en la pasada dictadura militar y en la actualidad en grandes sectores sociales que hoy sufren de la marginación. En el 2004 al Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos-Regional Mendoza. En el 2005 al Equipo Argentino de Antropología Forense. Y el año pasado (post Mortem) a monseñor Enrique Angel Angelelli.
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