El misterio de las armas
El fin de semana que murió, el fiscal Alberto Nisman había hecho más de una gestión para conseguir un arma. No sólo con su empleado Diego Lagomarsino, el dueño de la pistola hallada al lado de su cadáver.
Recurrió también a uno de sus custodios. El sábado por la mañana Nisman llamó a uno de los diez policías que tenía asignados para su protección, Rubén Benítez, el de más confianza con él. Lo invitó a entrar en su departamento, algo que no solía hacer, y le pidió asesoramiento para comprarse un arma. Dónde podía conseguirla y cuánto le costaría. Quería tenerla en la guantera del auto cuando saliera con sus hijas, le explicó. Benítez le aconsejó una pistola. Quedaron en volver a hablarlo el lunes.
Esta revelación, que va en línea con lo que había declarado Lagomarsino, es una novedad en el expediente judicial que investiga la muerte del fiscal del caso AMIA, encontrado sin vida en su departamento de Puerto Madero cuatro días después de haber denunciado a la presidenta Cristina Kirchner como autora de una “conspiración” para encubrir a los culpables del atentado a la mutual judía.
Benítez declaró el jueves pasado como testigo ante la fiscal Viviana Fein. La Nación reconstruyó su declaración de fuentes judiciales y policiales. Este testimonio parece fortalecer la hipótesis de que Nisman quería un arma para suicidarse. Pero no es la única lectura posible. Su búsqueda podría obedecer también a que tenía miedo, sabía que podrían atacarlo y trataba de protegerse.
Hoy, Benítez es uno de los 12 policías que está bajo investigación por supuestas negligencias en la custodia del fiscal. Por orden del secretario de Seguridad, Sergio Berni, la división Asuntos Internos de la Policía Federal abrió un sumario administrativo contra todo el personal que tenía asignado el cuidado del fiscal.
Los responsabilizan de un aparente “relajo” en las medidas de seguridad, que hizo que Nisman estuviera solo, sin policías en su departamento, el palier y el lobby del edificio el día que murió.
Nisman murió “alrededor del mediodía del domingo”, según confirmó ayer la fiscal. Está acreditado que la pistola utilizada fue la de Lagomarsino. “El proyectil y la vaina se corresponden con el arma”, dijo ayer Fein a la señal TN. También, que el disparo fue “sobre la oreja, con el arma apoyada sobre la sien” a una distancia que no puede haber sido mayor a “un centímetro”.
Esta revelación, que va en línea con lo que había declarado Lagomarsino, es una novedad en el expediente judicial que investiga la muerte del fiscal del caso AMIA, encontrado sin vida en su departamento de Puerto Madero cuatro días después de haber denunciado a la presidenta Cristina Kirchner como autora de una “conspiración” para encubrir a los culpables del atentado a la mutual judía.
Benítez declaró el jueves pasado como testigo ante la fiscal Viviana Fein. La Nación reconstruyó su declaración de fuentes judiciales y policiales. Este testimonio parece fortalecer la hipótesis de que Nisman quería un arma para suicidarse. Pero no es la única lectura posible. Su búsqueda podría obedecer también a que tenía miedo, sabía que podrían atacarlo y trataba de protegerse.
Hoy, Benítez es uno de los 12 policías que está bajo investigación por supuestas negligencias en la custodia del fiscal. Por orden del secretario de Seguridad, Sergio Berni, la división Asuntos Internos de la Policía Federal abrió un sumario administrativo contra todo el personal que tenía asignado el cuidado del fiscal.
Los responsabilizan de un aparente “relajo” en las medidas de seguridad, que hizo que Nisman estuviera solo, sin policías en su departamento, el palier y el lobby del edificio el día que murió.
Nisman murió “alrededor del mediodía del domingo”, según confirmó ayer la fiscal. Está acreditado que la pistola utilizada fue la de Lagomarsino. “El proyectil y la vaina se corresponden con el arma”, dijo ayer Fein a la señal TN. También, que el disparo fue “sobre la oreja, con el arma apoyada sobre la sien” a una distancia que no puede haber sido mayor a “un centímetro”.
DE LA REDACCIÓN
EL ARGENTINO/Agencias
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