El oficialismo hace cuentas para entrar al balotaje
El golpe dolió. Nadie lo niega. Sería imposible que alguien lo haga. Pero la foto final de los tres tercios cambió la proyección a futuro. “No estamos muertos”, se repiten unos a otros en Unión por la Patria. No se dan por vencidos y piensan en el balotaje. Creen que tienen posibilidades concretas de llegar. Faltan dos meses. Hay tiempo. El camino por recorrer todavía es largo.
Un día después de que el peronismo quede en el tercer lugar en las PASO y Sergio Massa segundo entre los candidatos más votados, la sensación que los atraviesa es que existen chances de quedar en pie en la elección general del 22 de octubre. De ser así, les permitiría lograr pasar al balotaje para enfrentar -según imaginan- a Javier Milei, que el último domingo se encargó de sorprender a propios y extraños.
“Ahora el objetivo nuestro es ganarle a Milei. Es la oposición de hoy. No hay que hablar más de Juntos por el Cambio. Ellos son parte del pasado”. La sentencia salió del entorno más cercano del ministro de Economía. La idea que buscarán llevar a la práctica es la de invisibilizar a la coalición opositora porque entienden que la discusión, de cara a la sociedad, es con la Libertad Avanza. Son ellos o nosotros. Los que salieron segundo se hundirán en el medio. Así lo entienden.
El análisis que hacen en el oficialismo es que Milei “ganó la interna opositora” al considerar que el libertario y Patricia Bullrich comparten el electorado. Creen que ellos son los únicos que tienen capacidad de ampliar el porcentaje de votantes de una manera considerable, aunque aceptan que algunos de los votos que obtuvo el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, pueden ser capturados por la alianza opositora más que por ellos.
En los próximos días, Massa empezará a polarizar la campaña con Milei. Es su nuevo rival arriba del ring. En las filas peronistas entienden que es el momento de explicar las consecuencias que pondrían tener las medidas económicas y las decisiones políticas que quiere tomar el diputado libertario en el caso de ser electo presidente.
Aseguran que no se trata de una campaña del miedo. “Hay que generar preocupación, no miedo”, explicó un importante funcionario nacional. De lo que están seguros es que la forma de afrontar los próximos dos meses de campaña no es como hizo el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, que ayer por la mañana sentenció: “Si Milei hace lo que dijo, van a tener muertos y sangre”. Están seguros que con ese discurso la gente se enoja más de lo que ya está.
La intención es explicar cómo medidas como la dolarización, la quita de ministerios, la intervención profunda del Estado puede perjudicar el día a día de la sociedad. A eso apostarán. “Una persona sin estructura y que recién apareció, le ganó a Juntos por el Cambio como oposición. La discusión sobre los problemas del futuro es con él”, reafirman en Unión por la Patria.
En paralelo a las medidas que Massa tomó ayer, como la devaluación del dólar oficial o el cepo al dólar MEP, en el peronismo empezaban a hacer cuentas para evaluar qué posibilidades hay de que entren al balotaje de noviembre. La escaza diferencia entre la Libertad Avanza, Juntos por el Cambio y Unión por la Patria es, dentro de la derrota, una buena noticia para el oficialismo, porque advierten que siguen intactas las chances de quedarse cuatro años más en la Casa Rosada.