Macri juró en la Ciudad
Mauricio Macri juró ayer al frente del Ejecutivo porteño con un discurso conciliador hacia el futuro gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y la promesa de "revertir la locura de la inseguridad", a partir de la inclusión social.
Ante la Asamblea Legislativa de la Ciudad, Macri aseguró que no será "opositor" al Gobierno nacional y deseó "el mayor de los éxitos" en su gestión a la presidenta electa.
"Quiero dejar claro que no vengo a ser oposición de nadie. No voy a guiarme por banderas políticas o diferencias partidarias", apuntó y agregó que pese a las "diferencias" que mantiene con la
Casa Rosada, el Gobierno nacional puede esperar de su parte "seriedad, honestidad, buena fe y la vocación de resolverlas mediante el diálogo democrático".
Ante un recinto colmado, que estalló en aplausos, le deseó también "la mayor de las suertes" al presidente Néstor Kirchner y "lamentó" las diferencias que mantuvieron en los últimos cuatro
años, aunque le reconoció al jefe de Estado saliente su compromiso "con sus ideas y con el trabajo".
Además, convocó al gobernador electo bonaerense, Daniel Scioli, a "trabajar juntos, estar cerca" para que "la pobreza y la exclusión sean superadas por la integración, la cohesión social y
la dignidad".
"Nuestra responsabilidad es la misma. La General Paz o el Riachuelo no son una frontera, al contrario, nos integran y nos unen, tanto en lo bueno como en lo malo", indicó al respecto.
A su lado, lo escuchaba atenta su vice, Gabriela Michetti, junto a quien juró "por Dios, la Patria y los Santos Evangelios" ante el cuerpo de legisladores porteños y el saliente mandatario
porteño, Jorge Telerman, quien minutos después le entregó el bastón de mando labrado para la ocasión por el orfebre Juan Carlos Pallarols.
Fuente: NA.
Este contenido no está abierto a comentarios