Juicio a los policías
El Tribunal ordenó la detención de un testigo a pedido del fiscal
Una pericia caligráfica determinó la falsedad de una denuncia policial que involucraba al desaparecido Elías Gorosito.
En el juicio que se les sigue a los policías de Paraná Lisandro Rodríguez, Diego Salvador y Jesús Salvador López por la desaparición de Elías Gorosito en 2002, cuando tenía 19 años, Ramón Franco, la persona a la cual el desaparecido y Ariel Zárate le habrían baleado el domicilio la noche previa al 13 de febrero de 2002, quedó detenido este lunes luego de incurrir en innumerables contradicciones en su declaración.
Una pericia caligráfica leída al comienzo de sexta audiencia del juicio oral que investiga la desaparición del joven paranaense confirmó, además, que la ampliación de la denuncia realizada por el testigo contenía una rúbrica falsa, tal como lo había expresado la semana pasada. El oficial Walter Gadea había asegurado este viernes que la firma era verdadera y certificó que el testigo había ampliado su denuncia, por lo que al contrastar la pericia con algunas declaraciones podría llegar a conjeturarse que se introdujo documentación falsificada.
“Mándeme a la cárcel si quiere. Esto ya se juzgó y se volvió a abrir. Está fuera de la Constitución”, manifestó Franco tras incurrir una y otra vez en serias contradicciones. Minutos antes, el fiscal Leandro Ríos había solicitado que se lo detenga por el delito de falso testimonio, ya que en su declaración de este lunes –además de reseñar hechos distintos ante las mismas preguntas- agregó aspectos novedosos en su relato que habían sido omitidos previamente.
El tribunal, compuesto por Marcela Badano, Marcela Davite y Hugo Perotti, ordenó la detención del testigo, quien se negó expresamente a seguir declarando.
Tras darse por terminada la etapa de recepción de prueba, este martes comenzarán los alegatos. Tras la exposición del Ministerio Público Fiscal llegará el turno de las querellas, representadas por Rubén Pagliotto e Iván Vernengo, quienes disertarán junto a otro letrado encargado de la demanda civil. Luego expondrá Marcos Rodríguez Allende, quien tiene en sus manos la defensa de los tres policías.
El fallo de la Corte Suprema
Como se informara, los imputados Rodríguez, Salvador y López fueron absueltos en el proceso llevado adelante en 2004 por el mismo hecho, pero la familia de Gorosito apeló la decisión –ratificada en una primera instancia por el Superior Tribunal de Justicia- hasta que la Procuración General de la Nación ordenó hacer lugar a su queja, declarar procedente el recurso extraordinario y dejar sin efecto el pronunciamiento apelado, por lo que instó que se realice un nuevo juicio. La Corte Suprema de Justicia, con la sola disidencia de Carmen Argibay, compartió e hizo suyos “los fundamentos y conclusiones del señor Procurador Fiscal”, Eduardo Enrique Casal.
El magistrado consideró que el fallo se sustentaba en afirmaciones dogmáticas, ya que se había rechazado la posibilidad de incluir una testigo clave que relató haber visto a Gorosito –quien entonces contaba con sólo 19 años- en el momento en que era llevado por las fuerzas de seguridad.
Una pericia caligráfica leída al comienzo de sexta audiencia del juicio oral que investiga la desaparición del joven paranaense confirmó, además, que la ampliación de la denuncia realizada por el testigo contenía una rúbrica falsa, tal como lo había expresado la semana pasada. El oficial Walter Gadea había asegurado este viernes que la firma era verdadera y certificó que el testigo había ampliado su denuncia, por lo que al contrastar la pericia con algunas declaraciones podría llegar a conjeturarse que se introdujo documentación falsificada.
“Mándeme a la cárcel si quiere. Esto ya se juzgó y se volvió a abrir. Está fuera de la Constitución”, manifestó Franco tras incurrir una y otra vez en serias contradicciones. Minutos antes, el fiscal Leandro Ríos había solicitado que se lo detenga por el delito de falso testimonio, ya que en su declaración de este lunes –además de reseñar hechos distintos ante las mismas preguntas- agregó aspectos novedosos en su relato que habían sido omitidos previamente.
El tribunal, compuesto por Marcela Badano, Marcela Davite y Hugo Perotti, ordenó la detención del testigo, quien se negó expresamente a seguir declarando.
Tras darse por terminada la etapa de recepción de prueba, este martes comenzarán los alegatos. Tras la exposición del Ministerio Público Fiscal llegará el turno de las querellas, representadas por Rubén Pagliotto e Iván Vernengo, quienes disertarán junto a otro letrado encargado de la demanda civil. Luego expondrá Marcos Rodríguez Allende, quien tiene en sus manos la defensa de los tres policías.
El fallo de la Corte Suprema
Como se informara, los imputados Rodríguez, Salvador y López fueron absueltos en el proceso llevado adelante en 2004 por el mismo hecho, pero la familia de Gorosito apeló la decisión –ratificada en una primera instancia por el Superior Tribunal de Justicia- hasta que la Procuración General de la Nación ordenó hacer lugar a su queja, declarar procedente el recurso extraordinario y dejar sin efecto el pronunciamiento apelado, por lo que instó que se realice un nuevo juicio. La Corte Suprema de Justicia, con la sola disidencia de Carmen Argibay, compartió e hizo suyos “los fundamentos y conclusiones del señor Procurador Fiscal”, Eduardo Enrique Casal.
El magistrado consideró que el fallo se sustentaba en afirmaciones dogmáticas, ya que se había rechazado la posibilidad de incluir una testigo clave que relató haber visto a Gorosito –quien entonces contaba con sólo 19 años- en el momento en que era llevado por las fuerzas de seguridad.
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