Empleabilidad en los jóvenes
Con casi cinco años sin que se generen empleos genuinos en el país, y un proceso recesivo que comenzó a agudizarse tras el aumento de los servicios y la caída en los salarios, la problemática del desempleo en los jóvenes comienza a ser un tema social que preocupa.
El Estado los asiste con subsidios para poder terminar la escuela secundaria, y los capacita a través de programas sociales, donde empresarios pueden tomar a jóvenes sin experiencia laboral para tenerlos unos meses a prueba y el Estado se hará cargo de un porcentaje de la carga salarial.
De acuerdo a un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IRAF) basado en datos oficiales, son alrededor de 323.500 jóvenes los afectados por la falta de un empleo, que habitan los 31 centros urbanos relevados por el INDEC.
El fenómeno está vinculado con las deficiencias del sistema educativo, los factores de exclusión social y las regulaciones para el ingreso por primera vez al mundo laboral.
El Estado no podrá hacer frente a esta realidad solo y es aquí donde el rol de los sindicatos, las cámaras empresariales y las universidades en su trabajo sociocomunitario son claves para revertir esta situación; mediante la implementación de programas de capacitación que posibiliten acceder al mercado laboral a los jóvenes.
Un adolescente que no estudia y no trabaja, es una persona que a mediano plazo tiene grandes posibilidades de caerse de todos los sistemas de la sociedad y terminar en la delincuencia.
El Estado también debe estar presente al generar una ingeniería impositiva que reduzca la cargas patronales a las Pymes y estas puedan generar más empleo genuino entre los jóvenes.
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