Por su elevado déficit, peligra la realización de la Fiesta del Pescado y el Vino en 2021

gastar más de 6 millones de pesos para organizar una fiesta deficitaria el año que viene? La última edición tuvo un déficit de 4.395.450 pesos.  

POR DIEGO ELGART

EL ARGENTINO

 

El bloque de concejales de Juntos por el Cambio, realizó un pedido de informe el 24 de enero de este año para solicitar al Departamento Ejecutivo Municipal que brinde un detalle pormenorizado de carácter público, respecto a todos los ingresos y egresos correspondientes a la “IV Fiesta del Pescado y el Vino” realizada entre los días 3 y 6 de enero pasado.

Se solicitó además que ese informe contemple todos los costos e ingresos vinculados al evento a saber: honorarios de músicos y locutores, horas extras de personal municipal, seguro, montaje, logística, baños químicos, carpas, internet; viáticos, ventas de stand y publicidad, aportes del Estado Nacional y Provincial.

También se solicitó especificar el modo de contratación utilizada si fue mediante licitaciones, cotejos de precios o contrataciones directas.

El pedido de informe tuvo despacho favorable en la Comisión Conjunta y fue girado a la Secretaría de Gobierno el 13 de marzo del 2020. Finalmente la titular de esa Secretaría Delfina Herlax contestó la solicitud el 26 de mayo.

En el balance general se especifica el número de los 22 decretos emitidos por el Ejecutivo para realizar las contrataciones de los distintos servicios necesarios para montar la fiesta, en donde se constata que el 90 por ciento de las contrataciones se realizaron por la modalidad de forma directa y a través de subsidios.

 

Los números del déficit

 

Solo se realizaron dos licitaciones (decreto 4646) para contratar el servicio de circuito cerrado de TV, streaming, grabación y proyección, por un monto de 250 mil pesos, cuyo adjudicatario fue Daniel Eduardo Pietroboni.

La segunda licitación (decreto 4947) fue  para la contratación del servicio de alquiler de gazebos estructurales y carpas, que fuera adjudicada a Sandra Analía Somaini por un monto de 378 mil pesos.

El costo total para llevar adelante la fiesta durante los cuatro días de duración fue de 6.343.450 pesos, de los cuales solo se obtuvieron ingresos por alquiler de stand en el patio de comidas por 1.948.000 pesos, lo que terminó arrojando un déficit de 4.395.450 pesos, de acuerdo a lo informado por la secretaria de Gobierno la contadora Delfina Herlax.          

Si bien los movimientos económicos de la fiesta pueden ser rastreados a través de los distintos boletines oficiales, la oposición reclamó un “balance específico donde estén contemplados todos los ítems que hacen a este evento y sea de fácil comprensión”.

De la misma manera se puso como ejemplo a la “Fiesta de la Playa” en Concepción del Uruguay que todos los veranos se realiza en el Balneario Banco Pelay, cuyos organizadores al finalizar la fiesta llaman a conferencia de prensa para dar un detallado informe económico. 

 

Los ítems cuestionados

por falta de transparencia

 

El 90% de los gastos fueron por contratación directa, lo que indica una ausencia de transparencia al no realizar más licitaciones privadas o públicas.

En la contestación que hace el Ejecutivo Municipal, al pedido de informe no hay detalle del ingreso por alquiler de stand, precio de cada una, modalidad de contratación. Se publicó desde el municipio 60 stand vendidos, hay una inconsistencia con la cantidad y el precio que sería mayor al ingreso. Los precios publicados para los stands, previo a la realización de la fiesta eran de 50 mil a 60 mil pesos, pero según los ingresos declarados estaría dando un promedio de 30 mil pesos.

No se incluyó todo el gasto municipal en personal y maquinaria, necesarios para montar el evento.

El pago de sonido e iluminación de $2.050.000 así como el de hotelería y cátering de artistas de $694.850 por contratación directa son muy cuestionables y  deberían haberse licitado.

La proyección para el evento 2021 sería, el déficit se incrementaría a 10 millones de pesos, agujero que  se financiará con los impuestos de la gente, que hoy apenas puede pagarlos, producto de la caída de la actividad económica.

No se pagó SADAIC  quien tiene un reclamo con el municipio de 500 mil pesos por este evento. En cuanto a  AADI CAPIF, se pagaron 100 mil pesos que no están informados entre los gastos de la fiesta.

No se informan gastos cómo: adicionales de policía, cobertura médica, seguros del espectador, vallado, sillas y alquiler y montaje de estos elementos.

Otros gastos cómo publicidad y promoción, limpieza están claramente por debajo de la realidad.

 

El oficialismo redobló la apuesta

 

Pese a un déficit creciente en la organización de la fiesta y las críticas “por falta de transparencia”, el intendente Martín Piaggio, redobló su apuesta el 10 de febrero cuando dio a conocer a través de prensa Municipal la firma del proyecto para declarar la Fiesta del Pescado y el Vino patrimonio municipal.

El proyecto de ordenanza se trató el viernes 5 de junio en la que el bloque oficialista le dio un  fuerte respaldo con nueve votos, tuvo el acompañamiento en general por parte del concejal del vecinalismo Luis Castillo, pero éste no lo acompañó en particular cuando se votó cada uno de los artículos.  En tanto los tres concejales de Juntos por el Cambio votaron por la negativa.

La ordenanza dispone que la Fiesta  deberá organizarse para su realización el primer fin de semana de enero de cada año, siempre y cuando no existan condiciones de fuerza mayor que obliguen la reprogramación de la misma en el transcurso de la temporada de verano del mismo año.

También garantiza en la contratación de artistas una circunstancia de paridad de género, contemplándose el cupo femenino como condición ineludible para su organización; adhiriendo, en consecuencia a la Ley Nacional Nº 27.539 de cupo femenino y acceso de artistas mujeres a eventos musicales. Así también se deberá garantizar la participación de artistas de nuestra ciudad, contemplándose como mínimo en un cincuenta por ciento de la totalidad de los y las artistas participantes de la Fiesta.

También impone y garantiza para las próximas ediciones, la entrada libre y gratuita al evento, facultándose al Departamento Ejecutivo a instrumentar las medidas necesarias para posibilitar que los sectores más vulnerables de nuestra ciudad accedan efectivamente a este derecho cultural.

 

Destrucción del aparato productivo

local y caída en la recaudación

 

Desde el 20 de marzo, cuando comenzó la cuarentena, la crisis en las ventas en el comercio minorista, que ya se arrastraba del gobierno macrista, se profundizó por la pandemia y varios locales tuvieron que cerrar.

El sector gastronómico y hotelero de la ciudad vive un contexto devastador, que ni siquiera la ayuda financiera que brinda el Gobierno Nacional para la recuperación productiva impidió el cierre de restaurantes y bares en la ciudad. La desocupación, la caída del salario real y el empobrecimiento de la clase media será una constante que se verá en el transcurrir de los próximos meses de este año.

Comprendiendo esta situación, el 3 de julio pasado, el intendente Martín Piaggio elevó un proyecto para otorgar ayuda económica a tasa cero y eximición de tasas al sector gastronómico, hotelero, gimnasios, jardines maternales, entre otros.

En el proyecto se establece que los fondos para dar estas ayudas económicas son municipales, y se da en el marco de un paquete de medidas que está generando la Municipalidad para auxiliar a diferentes sectores de la ciudad.  También aclara que desde el Ejecutivo Municipal se gestionarán fondos en todos los niveles de gobierno para poder ampliar en el futuro este tipo de ayudas.

Sin embargo, ya no se podrán seguir aumentando los impuestos municipales y las finanzas del Estado Nacional están en un estado calamitoso.

En los casi cuatro meses de pandemia la emisión monetaria no paró. Para el mes de junio la Casa de la Moneda había impreso más de 1 billón de pesos para asistir al sector productivo y el ingreso familiar de emergencia, pero desde el propio Gobierno Nacional, aseguran que este ritmo de emisión monetaria no podrá seguir.

En el mes de abril el PBI cayó un 26, 4 por ciento, lo que en términos de caída de actividad constituye la peor de la historia de Argentina y a esto se le tendrá que sumar una aceleración de la inflación. 

Se supone entoces que los pocos recursos que pueda obtener el Estado Nacional y Provincial mediante las exportaciones y la poca recaudación impositiva, solo se destinarán a palear la asistencia alimentaria de la pobreza estructural y los nuevos pobres que esta generando esta prolongada cuarentena.

De acuerdo al Observatorio  Social de la UCA, la pobreza ya está rosando el 50 por ciento, y podría llegar a agravarse en los próximos meses.

En este contexto, el Ejecutivo Municipal no puede arriesgarse a realizar un gasto tan grande para montar una fiesta que tendrá un déficit proyectado de 10 millones de pesos en 2021.

Indudablemete esos recursos deberán volcarse a la recuperación del aparato productivo local y a la asistencia alimentaria a los sectores más vulnerables de nuestra ciudad.