Las bibliotecas populares en época de pandemia:  Biblioteca Rodolfo García 

Las bibliotecas son puertas de acceso a los conocimientos y a la cultura, de esta manera cumplen el papel de mediadoras entre la comunidad y su saber: “Las Bibliotecas Públicas y la información en general son fuentes de poder y que cuando se las utiliza correctamente son instrumentos de cambio social” (Villegas, 1993).

 

Debido al contexto de pandemia y la tecnología que crece a pasos agigantados, las bibliotecas se encuentran en un proceso de cambio y transformación. Dicho proceso es necesario para que estas puedan seguir cumpliendo el rol de proveedoras de saber e igualadora social. 

El director de la Comisión Directiva de la Biblioteca Popular Rodolfo García, Marcos Henchoz, relata a los lectores de EL ARGENTINO cómo fue el 2020 y cómo enfrentan este nuevo año, como así también qué proyectos estiman para este 2021. 

¿Cómo fue el año 2020 para la Biblioteca Popular Rodolfo García? 

Esta biblioteca pudo abrir sus puertas en agosto del 2020 “hicimos el intento de abrir antes basándonos en la necesidad de asistir al otro en el papel físico si se piensa en las familias socias que necesitaban de material, pero no fue posible”, lamentó Henchoz.

Cuando la reapertura se concretó, en un primer momento no se podía leer en sala, solo se consumaban préstamos. Los libros que regresan a la biblioteca, necesitan de un cuidado especial, deben estar 48 horas en un canasto, aislados. Luego de ese tiempo, se vuelven a guardar en su sitio y pueden ser entregados a otro socio que lo requiera. 

Los socios respondieron, mientras la biblioteca estuvo cerrada pagaron la cuota “al cierre, en diciembre quedamos muy satisfechos; con irregularidades, pero  se pudo sostener” manifestó, el presidente de la Comisión Directiva. A partir de enero, la biblioteca tiene a disposición otros medios de pago: por transferencia bancaria y mercado pago.

 

La Biblioteca en tiempos de aislamiento

En enero, como todos los años, la biblioteca trabajó a puertas cerradas. Durante este mes se realizan los expurgos, es decir, la clasificación, limpieza y selección del material.  En ocasiones, las donaciones que llegan a la biblioteca, contienen material repetido. En este contexto, Henchoz explicó que: “de las donaciones que ingresan, solo nos quedamos con lo que no tenemos. Con lo repetido no hacemos acopio, sino que lo hacemos circular, trabajamos en redes. El trabajo en red es clave, es uno de nuestros pilares”. 

El material circula, y la biblioteca se asegura que se proporcione a quien lo necesita dentro o fuera de la ciudad (escuelas primarias y secundarias, asilo de ancianos, entre otros).

Este año, la Biblioteca Popular Rodolfo García tiene una agenda completa de actividades gratuitas de carácter online y presencial con todos los recaudos necesarios. En el salón, entran 50 sillas estilo auditorio. En contexto de pandemia, para los talleres presenciales se usan 10. Pero esto no es un impedimento para que lleven adelante actividades presenciales “Los talleres requieren de presencialidad, el debate el contacto con el material” sostuvo el director de la Comisión Directiva.

Ofrecen actividades virtuales, como presentaciones de libros de escritores noveles de la ciudad. El viernes, Paulina Lemes presentó su  adaptación del mito jujeño “El coludo”, ella le puso pintura y música. La presentación salió en directo en varias aulas de escuelas primarias. 

El martes 23/03 comienza el taller de “Prevención y Detección de Violencia Doméstica” a cargo de la asociación “Las Juanitas”. Esta asociación ayuda en lo psicológico, en lo sanitario, en lo jurídico. Durante el mes de marzo, se llevará a cabo el taller en red y presencial, es decir, se va a filmar con dos cámaras, va a salir por el canal de YouTube y  se transmitirá en vivo. Henchoz indicó que “la violencia la trabajamos día a día, en cada cosa que generamos u organizamos la información está. Proveemos folletos con datos útiles y números de contacto”

Durante todo marzo,  Henchoz que también es profesor de historia dictará el  taller de historia, que tiene por objetivo desmitificar cuestiones como por ejemplo: que la historia local se encuentra aislada de la nacional, entre otros aspectos. Los talleres y actividades propuestas por la biblioteca son con Resolución. 

También, durante este 2021 se le dará vida al nuevo sello editorial a la biblioteca, la primera acción será la publicación de un libro que recopila textos periodísticos y literarios de Fray Mocho.

Todas las actividades y talleres son transmitidos de manera abierta mediante Facebook, cada una de estas es grabada para luego utilizarse como material en la página web de la biblioteca. Las bibliotecarias trabajan digitalizando material para que los socios puedan contar con estos de manera fácil y rápida. En este contexto de actualización digital y actividades frecuentes, Henchoz afirmó con mucho orgullo que: “nosotros vivimos el servicios, somos usinas y generadores de ideas. La virtualidad nos potenció”. 

 

Ayudas económicas

“Todas las bibliotecas populares que tienen los papeles en orden, reciben ayuda de provincia. CONABIP te tira algunas líneas, para cubrir gastos corrientes. Te lo da fraccionado en dos otras veces al año. Nos proporciona diferentes auxilios, pequeños, pero muy necesarios. Con ese dinero se cubren gastos puntuales como: internet, feria del libro, entre otros”.

Para llevar adelante una Biblioteca Popular se requiere de una administración prolija y de administración financiera transparente. 

Un poco de historia 

La biblioteca surgió como iniciativa de vecinos y docentes “en un principio la biblioteca estuvo en la casa de una vecina, en un patio donde había malvones” recordó nostálgico el Director de la Comisión.

 En 1967 se nombra como “Alfredo Villalba”. Los alumnos de la escuela “Víctor Olegario Andrade”, tomaron  la iniciativa de ayudar a la biblioteca recolectando donaciones. 

El 12 de junio de 1999, en su refundación fue renombrada “Rodolfo García” en conmemoración de un estimado profesor.

Luego de muchos años de trabajo, la biblioteca pudo tener edificio propio, su dirección es Corrientes 223. En este nuevo edificio la biblioteca cuenta con calefacción, zona libre wifi, baño y cocina para preparar infusiones para los socios, a parte cuenta con más de veinte mil ejemplares, películas, documentales y mucho más.