Una banda dirigida desde la cárcel para múltiples delitos

Luego de cinco meses de una investigación que incluyó escuchas telefónicas, a cargo de la División Robos y Hurtos e instruida por el fiscal Santiago Alfieri, se logró desbaratar una banda criminal que tenía su centro de operaciones en la Unidad Penal Nº 1 de Paraná.

Conocidos delincuentes condenados por homicidios y otros delitos graves, dirigían desde la cárcel a una organización con al menos una decena de partícipes tras los muros. Robos, balaceras, estafas, extorsiones y narcotráfico, son los principales delitos que desarrollaban, con una millonaria recaudación.

Hubo una docena de detenidos luego de más de 20 allanamientos en distintos barrios de la capital provincial. Los principales perpetradores de los delitos son dos personas que estuvieron en la mira al inicio de la investigación por el homicidio de Gonzalo Calleja: Brandon Comas y Ezequiel Machuca Roda, del barrio 1° de Julio.

También está involucrado Iván Garay, uno de los imputados por el crimen del joven contador. Adentro de la cárcel lideraba la banda Jonathan “Chocho” Roda, condenado por el homicidio del contador Ricardo Lizarraga en 2014; junto a Brian Fassano, condenado por asesinar a balazos a Leandro Richard el mismo año para robarle la moto; Lautaro Martínez, alias “Gordo Lauti”, sentenciado por el homicidio de Maximiliano Truskot, también en 2014, en el barrio Libertad; Oscar “Negri” Romero, condenado por asaltos violentos; entre otros, consignó el diario Uno de Paraná.

Todos ellos estaban alojados en los pabellones 1 y 8 de la cárcel de Paraná, donde no sólo coordinaban las acciones delictivas en el exterior, sino también comerciaban la droga que lograban ingresar de distintas formas. Por ejemplo, se pudo constatar que una de los métodos para el ingreso de droga era con pelotas de fútbol, a las que le hacían un par de agujeritos, le metían la sustancia y desde la calle alguien la pateaba hacia el sector de la cancha.

En la celda de Roda encontraron varios cuadernos y hojas sueltas con anotaciones, donde el interno llevaba el registro tanto de los movimientos comerciales de la droga como de los números de teléfono, datos de redes sociales y de las cuentas que utilizaban para estafar a comercios de Paraná y para extorsionar a personas que caían en sus engaños.

Por lo que irá revelando esta investigación, no se descarta que el Gobierno provincial adopte medidas e implemente cambios en esta unidad carcelaria dependiente del Servicio Penitenciario de Entre Ríos.

Las tres mujeres detenidas son la madre, una hermana y otra pariente del “Chocho” Roda, quienes tenían activa participación en las actividades de la banda, desde la preparación y el ingreso de droga a la cárcel hasta la reducción de celulares, motos, bicicletas y electrodomésticos robados, pasando por el cobro del dinero de las extorsiones. El padre de los Roda es empleado del Estado provincial y militante de un sector del peronismo, pero se aclaró que no quedó involucrado en las actividades ilícitas investigadas.

 

Allanamientos

 

En el barrio 1° de Julio, allanaron siete casas y departamentos. En una, detuvieron a un joven de 18 años y a un amigo de 24 años, y secuestraron una moto Honda Tornado. En otra hallaron facturas por compras que superan los cien mil pesos, recibos de transferencias mediante Western Unión, y detuvieron a una mujer.

En la misma zona, también hubo procedimientos en calle Batalla de Suipacha, en 3 de Febrero y Don Bosco, en calle Trevesse (zona de la Escuela de la Policía) y en calle Austria. También hubo requisas en el barrio Mosconi, por calle Franzotti, Estado de Palestina y Buchardo, detalló el diario Uno.

En los allanamientos a los Pabellones 1 y 8 de la UP 1, que estuvieron a cargo de la División Homicidios, sorprendió la cantidad de celulares, chips y tarjetas de memoria hallados ocultos en las celdas, además de cuadernos con anotaciones. También secuestraron dos pelotas de fútbol con agujereadas, que habrían sido utilizadas para la mencionada metodología de ingreso de drogas.

También quedó detenido una persona de 27 años, identificado como Emiliano Dehan, primo de Brian Fassano, quien actuaba como vendedor de elementos robados y también se dedicaría a la compra venta de dólares, entre otros roles en la banda delictiva.

Esta persona alquila un departamento céntrico, en calle San Martín -entre Villaguay y Carbó-, en cuyo allanamiento encontraron 1.300 dólares, 10 mil pesos, una máquina contadora de billetes y 540 gramos de marihuana. También fue allanada la casa de su abuela en calle Victoria, porque iba diariamente a visitarla, y donde incautaron unos 300 dólares.

Hubo más requisas en domicilios del barrio CGT, por calle Santos Vega y en calle Simón Bolívar del barrio Maccarone. Asimismo, se revisó un auto Ford Fiesta Kinetic con numeración de chasis y motor que no corresponde con la patente, que tenía pedido de secuestro por partde de la Policía de Córdoba.

 

Investigación

 

Los detenidos serán imputados por el fiscal Alfieri por distintos hechos y delitos, según la participación que a cada uno le han corroborado durante la investigación. No se descarta que se impute a todos por participar de una asociación ilícita. La causa está lejos de terminar, ya que ahora deberán procesar la información que será extraída de las decenas de celulares y chips incautados en los procedimientos.

Se espera que la redada policial, con las evidencias reunidas en la investigación, le pongan un freno a los distintos delitos que vienen afectando a Paraná en los últimos meses, los cuales no podían ser cometidos sin el nivel de organización que se ha plasmado en esta causa. Los hechos hablan de que se trataba de la banda más activa y peligrosa de la ciudad, actualmente. Incluso, varios de los implicados han sido vinculados a graves sucesos ocurridos en la capital provincial en los últimos tiempos. Por ejemplo, se recuerda un episodio nunca investigado a fondo, cuando a “Machuca” Roda lo detuvieron a bordo de un auto que una hora antes había sido robado en una quinta de Colonia Avellaneda, un episodio que claramente fue un ajuste de cuentas por narcotráfico. En ese lugar habían quedado dos hombres (uno de ellos empleado municipal) gravemente heridos, y les habrían robado varios kilos de cocaína que estaban ocultos en un auto Ford Ka que apareció en esa quinta, desmantelado. Las víctimas de ese hecho estaban vinculadas a la banda que sufrió el ataque de sicarios el año pasado, con el triple crimen de narcos ocurrido en el barrio Los Paraísos. El único imputado por este triple homicidio es Ramiro Colman (ahora también acusado por el caso Calleja), señalado como amigo y socio de Roda.