El Agua Manda comenzó hace unos días el descenso por el río Paraguay

En esta ocasión la expedición contemplaba llegar por tierra a la naciente del río Paraguay para comenzar a descender desde allí, en un recorrido que comprenderá unos 4 mil kilómetros de ríos libres -esto implica que no pasarán por ninguna represa-, propulsados en kayaks de remo.
Según informan los cuatro expedicionarios -Ezequiel Vela, Lucas de Miguel, Hermann Feldkamp y Juan Martín Rivas- en su blog “Ríos libres para pueblos libres”- la noche del domingo 8 de mayo “llegamos a Yapeyú, el lunes estuvimos en Iguazú. El martes cruzamos la frontera, y llegamos a Dourados la ciudad más cerca de Pedro Juan Caballero, en Paraguay. El miércoles llegamos a Campo Grande donde nos ponen al tanto de la situación de la altura del río y nos brindan algunas recomendaciones. El jueves partimos rumbo a Rondonopolis, ciudad de apenas 56 años. El viernes nos encontró en Cuiabá, ciudad capital de estado y portal del Pantanal”.
El relato de la travesía acuática que ya lleva unas dos semanas continúa de la siguiente manera: “Siguiendo el camino de los ríos fue que llegamos el sábado a Diamantino pueblo rodeado de riquezas, desde diamantes, oro y plata. Hasta pertenecer al límite natural de las cuencas amazónicas y Del Plata, las vertientes brotan en las sierras y derraman su líquido para un lado y para el otro, con tanta magia que los peces de un lado no se juntan con los del otro y a su vez son completamente diferentes.
Gracias a la gentileza del Intendente Juviano Lincoln que nos recibe como celebridades llevándonos a su casa, brindándonos todo su apoyo, recorrimos la Amazonia conocimos parte de las Sete Lagoas, pero no pudimos llegar a la laguna de la princesa -donde brota el agua hacia la superficie- porque los propietarios de la Facenda no nos dejan pasar por ser ecologistas –se trata de unos argentinos que no han cumplido con la reforestación ya que es una zona desmontada para la producción agrícola”.
En tanto el relato de de los integrantes de El Agua Manda quienes eligieron el kayak para desplazarse “porque es una navegación silenciosa, y uno se desplaza con la sensación de ir al ras del río”, continúa con la siguiente descripción: “Podemos contemplar desde lo alto la belleza inmaculada de este pueblo serrano, corazón profundo de nuestra América. Y como parte del mundo donde interactúan los hombres, su obra esta a la vista 275 años de historia del hombre blanco y miles de los originarios, que aún viven en la zona. Aquí apreciamos con tristeza como se perdió la selva a cambio de los monocultivos que nos han acompañado desde nuestra salida en Gualeguaychú, miles de kilómetros recorridos y un solo modelo productivo expansionista y devorador, el de Monsanto. Tristeza al querer ver la Amazonia y solo ver choclo y soja, tristeza desolación en el paisaje. Pero donde el hombre no talo vaya uno a saber por que la expresión máxima de la creación divina se deja sentir y nos irradia de vida. Desde este corazón que pide ser visto por el mundo por sus tantas riquezas queremos seguir soñando con que el ser humano se va a iluminar a corto plazo amigándose con la naturaleza”.
La “Expedición a la tierra sin mal, en defensa de los ríos” estaba el pasado miércoles a punto de iniciar el descenso por las aguas del río Paraguay, en un peregrinaje “por las orillas de la esperanza de un mundo mejor”. El próximo puerto de El Agua Manda es Barra do Bugres.
La experiencia de estos cuatro jóvenes se puede seguir a través de su blog “Ríos libres para pueblos libres”: http://elaguamanda.blogspot.com, donde también se podrán apreciar imágenes como la que se muestra en esta nota.