Buen Día
# El otro debate
La controversia por la presencia de la contaminante Botnia en la región, genera algo más que un conflicto diplomático entre dos países hermanos como Argentina y Uruguay.
No sólo se trata de cuánto y cómo contaminan las industrias celulósicas (al respecto no hay dudas, la discusión se centra en el parámetro), sino que también tallan conceptos clave en la construcción de ciudadanía como la licencia social, el derecho a ser parte del diseño territorial de las comunidades, y hasta qué punto los países del hemisferio norte tienen derecho a usar al Sur como un basurero de sus industrias sometiendo la voluntad soberana de los gobiernos de la región.
El otro nivel de la discusión está centrado en el acceso del agua dulce potable y en las cadenas conexas de las industrias celulósicas. Las propias empresas justifican su arrogancia al sostener que tienen que instalarse ?allí donde se encuentra la madera?.
El sector forestal, muy proclive a defender a estas industrias, es el primer escalón de la producción celulósica.
En el informe especial que presenta hoy EL ARGENTINO se demuestra que las condiciones laborales de los trabajadores forestales avergüenzan las más elementales normas de convivencias de los derechos ciudadanos.
El trato medieval y de explotación es indigno de quienes en teoría sostienen que ejercitan las mejores prácticas empresarias. Esto no es novedoso y antecedentes se encuentran en casi todos los años anteriores. Por eso es indignante y representa un agravio.
¿Cuándo los gobiernos y con ellos los organismos del Estado realmente sancionarán de manera ejemplar a las empresas forestales que hacen del trabajo una esclavitud?
# Situación eléctrica
El 20 de diciembre se estima que culminarán las obras de la línea de alta tensión que unirán las estaciones transformadoras de Santo Tomé y Calchines en la ciudad de Santa Fe.
Se trata de una iniciativa que se desarrolla con una inversión de casi 31 millones de pesos y la obra eléctrica consiste en la construcción de casi 20 mil metros de líneas de alta tensión de 132 Kv y cables subterráneos que unirán las estaciones transformadoras Santo Tomé y Calchines y se calcula que esta obra permitirá triplicará la oferta energética desde Santa Fe hacia Entre Ríos, que sumados al aporte de ENERSA permite sumar 140 Mv a la demanda de la región, lo que representa casi el 50 por ciento de la potencia instalada. Esto es equivalente a la provisión energía eléctrica para 300 mil viviendas.
El próximo año comenzarán en Entre Ríos a construirse la estación transformadora Gran Paraná, que junto con la de Santo Tomé es considerada clave para el abastecimiento de ambas provincias.
El monto total de la obra es de 31 millones de pesos y consiste en el montaje de líneas aéreas y cables subterráneos de 132 mil V, el tendido aéreo es de 17 kilómetros y el subterráneo 4,5 kilómetros y van acompañados de fibra óptica para comunicación y teleservicios en cada extremo con un recorrido de seis kilómetros.
El nuevo transformador en Santo Tomé permitirá pasar de 600 MVA a 900 MVA de potencia para la región y atender el crecimiento de la demanda a mediano plazo de manera previsible. Así, con inversión genuina se superarán los problemas crónicos en el suministro energético, indispensable para la economía y la vida en sociedad.
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