Jóvenes movilizados
Desde hace un tiempo los alumnos de la Escuela Secundaria Nº 131 “María América Barbosa” vienen realizando una protesta pacífica en reclamo de mejoras en el edificio escolar que se encuentra en pésimas condiciones.
Se trata de un edificio antiguo donde funcionaba el antiguo Hogar de Niñas y que en la actualidad la Escuela Secundaria comparte con la escuela primaria “Fray Mamerto Esquiú”, por lo que los años y el uso lo han deteriorado mucho.
Pero lo que merece ser destacado de la medida que llevan a cabo los jóvenes estudiantes es que la protesta que realizan no se basa en perder horas de clase ya que los alumnos dejaron en claro que no desean dilapidar sus horas de aprendizaje. Y la metodología que eligieron para demostrar su descontento con la inacción de las áreas de Educación que deberían avanzar en el proyecto existente de refuncionalización y ampliación del edificio, es recibir las clases en el patio de la escuela donde colocan carteles de protesta.
Se trata de estudiantes que se movilizan y que están comprometidos con su escuela por lo que decidieron pelear por su derecho a ser educados en un lugar digno, seguro y que no implique un riesgo para su salud.
A medida que pasa el tiempo son más los cursos que se suman a la medida. Esto demuestra que los jóvenes tienen un fuerte arraigo con su escuela y pretenden que las cosas cambien cuanto antes.
Pero lo que merece ser destacado de la medida que llevan a cabo los jóvenes estudiantes es que la protesta que realizan no se basa en perder horas de clase ya que los alumnos dejaron en claro que no desean dilapidar sus horas de aprendizaje. Y la metodología que eligieron para demostrar su descontento con la inacción de las áreas de Educación que deberían avanzar en el proyecto existente de refuncionalización y ampliación del edificio, es recibir las clases en el patio de la escuela donde colocan carteles de protesta.
Se trata de estudiantes que se movilizan y que están comprometidos con su escuela por lo que decidieron pelear por su derecho a ser educados en un lugar digno, seguro y que no implique un riesgo para su salud.
A medida que pasa el tiempo son más los cursos que se suman a la medida. Esto demuestra que los jóvenes tienen un fuerte arraigo con su escuela y pretenden que las cosas cambien cuanto antes.
Este contenido no está abierto a comentarios