Familiares habrían identificado el cuerpo como el de Solange Aguirre
Ninguna información oficial fue suministrada ayer por el juez de Instrucción N° 2, doctor Arturo Exequiel Dumón, que tiene en sus manos el caso del cuerpo de la mujer que fuera encontrado semienterrado y decapitado en un paraje de arroyos y canales de la zona de Brazo Largo el sábado último.
Sus familiares (entre ellos la madre y hermanos) se trasladaron a nuestra ciudad convocados por el magistrado actuante y la habrían reconocido por algunos tatuajes que tenía en su cuerpo, que el lunes fue sometido a la autopsia en la Morgue Judicial del Cementerio municipal.
A pesar de no tener la cabeza, la clave del reconocimiento habrían sido dichos tatuajes, con las iniciales de los nombres de sus dos hijos, "A" y "L", aunque los mismos habían sido tratados de ‘borrar’ con cortes de un arma blanca, con el evidente propósito de dificultar la identificación.
Solange Aguirre, que era madre de un varón de 5 años y una nena (que el lunes cumplió 2 años), fue vista por última vez cerca de las 19:30 del pasado miércoles , salió de un supermercado chino y cruzó la ex ruta 9 hacia el negocio de una ex pareja, padre de su hija menor.
Según informó la familia de la joven a distintos medios, se sospecha de la participación de ese hombre -Alejandro Reynoso, de 41 años- en la desaparición, motivo por el cual realizaron marchas en las que reclamaron justicia y atacaron sus comercios, dos pollerías ubicadas en Benavídez.
La denuncia por la desaparición de Aguirre fue realizada el jueves y la investigación recayó en la Fiscalía Especializada en Investigaciones de Trata de Personas y Delitos Conexos de San Isidro, a cargo del fiscal Marcelo Fuenzalida.
El fiscal consiguió el video del supermercado chino donde a las 19:46 del miércoles pasado se la ve a Aguirre -vestida de azul y con zapatillas negras marca Nike- comprando cigarrillos y saliendo del local en dirección a una de las pollerías de su ex pareja.
Voceros judiciales revelaron que la propia madre de Solange fue quien declaró en la causa que aquel miércoles su hija le dijo que además de ir a comprar cigarrillos, iba a aprovechar para ir a hablar con el padre de su hija.
El pollero, de 38 años, fue convocado a declarar a la Fiscalía y reconoció ante Fuenzalida que Solange fue a visitarlo esa tarde y de esta manera se convirtió en la última persona que la vio con vida.
Los voceros judiciales bonaerenses indicaron que el hombre explicó que de ese local se fueron en auto hasta su otra pollería, que allí charlaron de asuntos personales y luego la chica se retiró por sus medios.
Aparte de estas declaraciones, el fiscal Fuenzalida realizó otras medidas como un rastrillaje con perros y convocó a detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, de la SubDDI Tigre y de la Policía Científica.
Fuenzalida realizó un allanamiento en búsqueda del celular de la víctima y otros procedimientos donde se secuestraron elementos que serán peritados.
El sábado, al conocerse el hallazgo del cuerpo decapitado de una mujer, el fiscal Fuenzalida viajó al lugar.
El cadáver estaba semienterrado, completamente desnudo, decapitado, con las yemas de sus dedos seccionadas y con heridas cortantes en un hombro y en la espalda.
Según la autopsia realizada en la morgue judicial de Gualeguaychú, el crimen se produjo entre 12 y 24 horas antes de ser hallado el cadáver.
Otros datos que trascendieron oficiosamente sobre la autopsia es que la víctima tenía vaciado el estómago y presentaba una pronunciada dilatación en el ano.
Circuló la versión de que el pollero, su mujer y un hermano de aquél habían sido detenidos, pero luego este rumor fue desmentido.
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