“SE HIZO EL LOCO CONMIGO”, DICE EN UN VIDEO QUE SUBIÓ A LAS REDES
La Fiscalía pretende llevar a juicio a un hombre por torturar y matar a un perro
Una filmación subida a las redes sociales, donde se muestra al acusado alardeando sobre la muerte del perro y al animal despellejado sobre una mesa, abrió una investigación que tiene a un sujeto de 31 años imputado por tenencia ilegal de armas y actos de crueldad animal. El defensor pidió por una probation, pero el Fiscal y asociaciones proteccionistas se oponen. Ahora debe resolver el Juez.
Carlos Riera
“Se hizo el loco conmigo” y “es todo manteca, todo vitamina para mi cuerpo”, se lo escucha decir al presunto autor de un video aberrante de tortura animal, que sucedió en abril de este año en un campo de Villa Paranacito, que despertó la indignación de varios vecinos de la localidad del sur de Entre Ríos, de una asociación proteccionista y de la Asociación Ambientalista Ecoguay de Gualeguay, que radicaron denuncias que recayeron en la fiscalía a cargo de Gastón Popelka.
A partir de allí se inició una investigación que culminó con la imputación por la forma perversa, mutilación, vivisección, torturas, y actos de crueldad animal a un perro que pertenecía a un hombre que le había dejado en cuidado el animal a un vecino del imputado.
Según pudo saber EL ARGENTINO, desde la Justicia se ordenó un allanamiento en su domicilio sobre la costa del rio Paraná-Bravo, Quinta Mazu, en Villa Parancito, donde se secuestró una escopeta calibre 16, de la cual no tenía autorización para la tenencia, se ubicó la misma mesa que aparece en el video y un cuchillo que presuntamente sería el mismo con el que se muestra en la filmación subida a las redes. Por esto, se lo imputó de tenencia ilegal de armas y actos de crueldad animal.
El caso originó mucha irritación entre la población de Villa Paranacito, principalmente de un grupo de vecinas proteccionistas que también realizaron la denuncia, pero además la Asociación Ambientalista Ecoguay de Gualeguay presentó un escrito en donde se le solicita al fiscal Popelka que “ante este hecho aberrante, de extrema crueldad contra un animal se enjuicie al que lo cometió y se lo condene como lo merece”. Ambas ONG se oponen a la posibilidad que se lo beneficie con una probation.
El fiscal Popelka consideró que las lesiones fueron provocadas de forma intencional por el acusado, que le causó “torturas y sufrimientos innecesarios”, y que este tipo de acción se encuadrada en el delito de crueldad animal conforme artículo 3 inciso 7° de la Ley Nacional 14.346, que pena con hasta 1 año de prisión efectiva al que por “Lastimar y arrollar animales intencionalmente, causarles torturas o sufrimientos innecesarios o matarlos por sólo espíritu de perversidad”.
El defensor público de Islas del Ibicuy, Lautaro Boladeres, presentó ante el juez de Garantías de Gualeguaychú, Tobías Podestá, la intención del acusado de someterse a una probation y procesalmente se la puede otorgar debido a que el acusado no tiene antecedentes y se trata de una pena menor a los tres años. Pero el hecho suscitado, la publicidad del caso a través de las redes sociales y la indignación de la opinión pública ha generado un rechazo a que una posibilidad de estas características pueda suceder.
Hace poco tiempo atrás sucedió un hecho muy similar en la provincia de Río Negro, donde la Fiscalía sostuvo que por razones de política criminal no correspondía la aplicación del beneficio de una probation a un acusado de maltrato animal y la Jueza de Garantías convalidó la postura y el imputado irá a juicio.
En el caso de Villa Paranacito, que se tramita en la jurisdicción de Gualeguaychú, será el juez Podestá el que deberá analizar el caso en la próxima audiencia del 14 de junio, y en sus manos tendrá la decisión de conceder la probation o rechazar esa posibilidad como requerirá el fiscal Popelka, para que el hombre de 31 años enfrente un juicio por actos de crueldad animal. En caso de que pueda afrontar un juicio, podría sentar un precedente para este tipo de hechos que siempre terminan en probation que nadie controla.