María Elena
Es muy difícil despedir a una amiga pero no queremos dejar pasar este día aunque ya no estés más con nosotros. A la mujer luchadora y trabajadora incansable, madre comprensiva, amiga, confidente, contenedora, abuela dulce y buena.
Hiciste con tus manos tu propia casa y las de tus vecinos. Compartiste este programa del Banco Popular de la buena fe, donde te dedicabas, aprendiste, eras inteligente, alegre, compañera, amiga , siempre estabas atenta a la necesidad de todos, eras la primera en llegar a la vida de centro. Nunca te quejabas, siempre estarás con nosotros. Sabemos que Dios tenía un lugar preparado donde descansar para siempre. Emprendedoras y tus compañeros promotores del Banquito de Suburbio Sur, Cooperativa Tomás de Rocamora.
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