River volvió a deslumbrar, goleó a Defensa y Justicia y quedó puntero en el torneo
Con otra actuación muy destacada, River Plate goleó anoche 3 a 0 a Defensa y Justicia en el Monumental, en un encuentro correspondiente por la cuarta fecha del Torneo Transición y se colocó como líder, dos puntos por encima de Vélez y Racing.
Los dos tantos fueron convertidos por Carlos Sánchez, a los 33 y a los 42 minutos, luego de dos buenas jugadas colectivas que comenzaron con pelotas mal entregadas por el rival y por Teófilo Gutiérrez, a los 31 de la segunda etapa, cuando el partido estaba casi liquidado.
En un partido que había sido parejo hasta el primer gol, una vez que River abrió el marcador fue un monólogo del local, que al igual que la fecha pasada ante Godoy Cruz dejó una gran impresión.
De esta forma, el equipo de Gallardo volvió a ganar, gustar y golear.
Este es otro River. Gallardo potenció al último campeón y le estampó su idea en la cabeza: hay que ir al frente. Y no de cualquier forma. Presionando bien arriba, buscando siempre al compañero por abajo y siendo solidario cuando no se tiene la pelota. Como si se estuviera gestando ese famoso River que responde al paladar del Monumental. Con doblete de un renovado Carlos Sánchez y otro de Teo, le ganó muy bien a Defensa 3-0 y, al menos hasta que juegue Vélez, quedó solito en la punta.
Más allá de la chapa final, Defensa no fue un espectador. Franco se la jugó con un planteo agresivo y, de contra, tuvo las primeras chances del partido. River tenía la idea fija, pero tardó un poquito en acomodarse. Hasta que Teo y Pisculichi agarraron la manija, los carrileros se soltaron y la orquesta empezó a afinar. El primero de Sánchez fue muy parecido al 1-0 contra Godoy Cruz, que también fue suyo.
Lo mismo para el 2-0. Más “sucio”, porque al “Negro” le quedó después de un rebote. Defensa siguió yendo como pudo pero, amparado en la ventaja, River definió de contra con el (acostumbrado) gol de Teo, máximo artillero del torneo. Gallardo siguió pidiendo y su equipo siguió yendo arriba, buscando siempre el arco rival.
El “ole” y las palmas del Monumental se comieron el último cuarto de hora antes de la ovación final. Núñez es pura alegría.
En un partido que había sido parejo hasta el primer gol, una vez que River abrió el marcador fue un monólogo del local, que al igual que la fecha pasada ante Godoy Cruz dejó una gran impresión.
De esta forma, el equipo de Gallardo volvió a ganar, gustar y golear.
Este es otro River. Gallardo potenció al último campeón y le estampó su idea en la cabeza: hay que ir al frente. Y no de cualquier forma. Presionando bien arriba, buscando siempre al compañero por abajo y siendo solidario cuando no se tiene la pelota. Como si se estuviera gestando ese famoso River que responde al paladar del Monumental. Con doblete de un renovado Carlos Sánchez y otro de Teo, le ganó muy bien a Defensa 3-0 y, al menos hasta que juegue Vélez, quedó solito en la punta.
Más allá de la chapa final, Defensa no fue un espectador. Franco se la jugó con un planteo agresivo y, de contra, tuvo las primeras chances del partido. River tenía la idea fija, pero tardó un poquito en acomodarse. Hasta que Teo y Pisculichi agarraron la manija, los carrileros se soltaron y la orquesta empezó a afinar. El primero de Sánchez fue muy parecido al 1-0 contra Godoy Cruz, que también fue suyo.
Lo mismo para el 2-0. Más “sucio”, porque al “Negro” le quedó después de un rebote. Defensa siguió yendo como pudo pero, amparado en la ventaja, River definió de contra con el (acostumbrado) gol de Teo, máximo artillero del torneo. Gallardo siguió pidiendo y su equipo siguió yendo arriba, buscando siempre el arco rival.
El “ole” y las palmas del Monumental se comieron el último cuarto de hora antes de la ovación final. Núñez es pura alegría.
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