El acordeonista Raúl Barboza, de regreso en Gualeguaychú
Quizás sea pura coincidencia, pero lo cierto es que Raúl Barboza, considerado “el maestro” vuelve a Gualeguaychú para tocar en el Teatro este jueves, día que en recuerdo de Sarmiento festejamos junto a todos los que comparten la vocación por la enseñanza.
Y a Barboza se lo considera un maestro no sólo como acordeonista, sino también, por haber luchado por llevar el chamamé a los teatros y fundamentalmente, por su calidad como persona. Porque suele educar con sus gestos.
Esta vez, como la anterior, vendrá convocado por Damián Lemes, que compartirá el escenario con el trío que integra junto a Marcelino Wendeler y Alejandro Della Penna.
En la charla con EL ARGENTINO, Lemes dijo “Barboza pasó muy bien en Gualeguaychú. El Teatro estuvo lleno y los que asistieron lo recuerdan por el talento que dejó expuesto y por la manera en que saludó a todos al terminar la función”, seguramente, acotamos, por aquello de que “cuanto más alto es el bambú, más se inclina para dar su sombra”, y Lemes coincidió.
“Como viene a Argentina dos veces al año y ya hemos establecido una relación con sus músicos -continuó- me consultaron para traerlo a alguna ciudad de la zona. Pregunté a la gente que lo escuchó en febrero y por mayoría, me dijeron que les encantó y que volverían a escucharlo. Y para mí es un orgullo enorme que me haya invitado a compartir el escenario, ahora con el trío que tengo con Marcelino Wendeler y Alejandro Della Penna para tocar mis canciones, que integran el disco a punto de salir”.
De la actuación conjunta en febrero, Lemes recordó “fue todo un disfrute. Me sentía muy halagado y cómodo como anfitrión, porque hacía como ocho años que Raúl no venía. Recuerdo que estuve en la tertulia escuchándolo por primera vez y quedé maravillado por su logro de que la música del litoral pueda tener un vuelo tan alto y la puerta abierta a los grandes teatros del mundo”.
Raúl Barboza -como se ha dicho- ha llevado el chamamé a los grandes escenarios, por eso se lo reconoce como su embajador, además de por su forma única de tocar.
Cuando estuvo en febrero, en el escenario del Teatro Gualeguaychú se vio a un hombre abrazar el acordeón y disfrutar con las cadencias como si lo hiciera en soledad o para amigos. Pero lo hizo a sala llena.
A los 76 años, sigue representando a la Argentina en cada una de sus presentaciones internacionales: La Stage Academia de Acordeón de Marseille lo tuvo como principal Master Class. Por segundo año consecutivo participó en la edición 2014 de "Trobada D'acordionistes D'arsèguel" (Pirineos, Catalunya), festival que desde hace treinta y cinco años reúne a los mejores acordeonistas de todo el mundo.
También y respondiendo a un pedido del Ministerio de Cultura de Francia, viajó a Cabo Verde para dar clínicas y conciertos didácticos para músicos sudafricanos, en la tierra de la legendaria cantante Cesaria Évora, quien en 1995 lo escuchó en París y le pidió su participación en su disco para el sello BMG.
En marzo pasado cerró el homenaje a Julio Cortázar, acontecimiento organizado por la Secretaría de Cultura de la Nación y celebrado en el Salón du Livre de París.
Y ahora, estará en Gualeguaychú por segunda vez en un año.
Por Silvina Esnaola
EL ARGENTINO
Esta vez, como la anterior, vendrá convocado por Damián Lemes, que compartirá el escenario con el trío que integra junto a Marcelino Wendeler y Alejandro Della Penna.
En la charla con EL ARGENTINO, Lemes dijo “Barboza pasó muy bien en Gualeguaychú. El Teatro estuvo lleno y los que asistieron lo recuerdan por el talento que dejó expuesto y por la manera en que saludó a todos al terminar la función”, seguramente, acotamos, por aquello de que “cuanto más alto es el bambú, más se inclina para dar su sombra”, y Lemes coincidió.
“Como viene a Argentina dos veces al año y ya hemos establecido una relación con sus músicos -continuó- me consultaron para traerlo a alguna ciudad de la zona. Pregunté a la gente que lo escuchó en febrero y por mayoría, me dijeron que les encantó y que volverían a escucharlo. Y para mí es un orgullo enorme que me haya invitado a compartir el escenario, ahora con el trío que tengo con Marcelino Wendeler y Alejandro Della Penna para tocar mis canciones, que integran el disco a punto de salir”.
De la actuación conjunta en febrero, Lemes recordó “fue todo un disfrute. Me sentía muy halagado y cómodo como anfitrión, porque hacía como ocho años que Raúl no venía. Recuerdo que estuve en la tertulia escuchándolo por primera vez y quedé maravillado por su logro de que la música del litoral pueda tener un vuelo tan alto y la puerta abierta a los grandes teatros del mundo”.
Raúl Barboza -como se ha dicho- ha llevado el chamamé a los grandes escenarios, por eso se lo reconoce como su embajador, además de por su forma única de tocar.
Cuando estuvo en febrero, en el escenario del Teatro Gualeguaychú se vio a un hombre abrazar el acordeón y disfrutar con las cadencias como si lo hiciera en soledad o para amigos. Pero lo hizo a sala llena.
A los 76 años, sigue representando a la Argentina en cada una de sus presentaciones internacionales: La Stage Academia de Acordeón de Marseille lo tuvo como principal Master Class. Por segundo año consecutivo participó en la edición 2014 de "Trobada D'acordionistes D'arsèguel" (Pirineos, Catalunya), festival que desde hace treinta y cinco años reúne a los mejores acordeonistas de todo el mundo.
También y respondiendo a un pedido del Ministerio de Cultura de Francia, viajó a Cabo Verde para dar clínicas y conciertos didácticos para músicos sudafricanos, en la tierra de la legendaria cantante Cesaria Évora, quien en 1995 lo escuchó en París y le pidió su participación en su disco para el sello BMG.
En marzo pasado cerró el homenaje a Julio Cortázar, acontecimiento organizado por la Secretaría de Cultura de la Nación y celebrado en el Salón du Livre de París.
Y ahora, estará en Gualeguaychú por segunda vez en un año.
Por Silvina Esnaola
EL ARGENTINO
Este contenido no está abierto a comentarios